DÍA DE EMOCIONES

Va a ser difícil olvidar este día. Para los amantes de la Fórmula 1 el Gran Premio de Bélgica 2008 será recordado como el de final más caótico, emocionante, dantesco y espectacular de los últimos tiempos. El duelo entre Raikkonen y Hamilton ha sido lo mejor que hemos visto en los últimos tiempos. Es por esto que me niego a aceptar que la sanción a Hamilton al final de la carrera sea justa. Es posible que condujese al límite y que no cumpliese con el espíritu de la norma después de saltarse la chicane, pero creo que fue pícaro, listo y agresivo. Todo lo contrario que Raikkonen, que hoy ha vuelto a defraudarme. No me gusta la sanción porque no beneficia a ninguno de los dos protagonistas del día, ni al infractor, obviamente, ni a la víctima. Hamilton pierde la victoria, pero Kimi se queda como está. El único que gana es Massa que desde mi punto de vista ha hecho una carrera triste y que cuando se ha puesto a llover no ha arriesgado lo más mínimo. Si hubiese durado la carrera una vuelta más le hubiesen pasado todos.

Para mi la carrera ha estado llena de emociones, pero el resto del día también. Lo normal cuando cumples años es que te hagan un regalo. Sin embargo, hoy me he dado cuenta de que tengo la suerte de tener un regalo cada día. El regalo de tener el mejor equipo de trabajo del mundo. No somos sólo compañeros, somos algo más, algo diferente al resto. Algo que después de muchos años trabajando en este mundo tan complicado y lleno de ambiciones, envidias y zancadillas, he descubierto que es único. Soy muy afortunado al dirigir a un grupo de locos como este. No importan las tensiones, ni las discusiones, ni la carga brutal de trabajo que tenemos. Somos como una familia, somos la envidia del paddock. Aquí los técnicos, los productores, los cámaras, los conductores de camión, los redactores... hacen su trabajo, pero también están ahí para animarte cuando estás bajo, para darte una palmadita en la espalda si ven que lo necesitas, para tomarse una cervecita contigo y escuchar con paciencia cuando saben que necesito desahogarme. No os puedo engañar y supongo que os lo imaginaréis. En un medio de comunicación grande suele haber muchos malos rollos, roces, diferencias de parecer, discrepancias, envidias... Me imagino que como en cualquier trabajo. Siempre surgen problemas cuando estás trabajando con otras personas porque es imposible llevarse bien con todo el mundo o caerle bien a todos. La vida es en realidad como un Gran Hermano sin cámaras. He visto mierda en todos los trabajos por los que he pasado. Sin embargo, aquí es diferente. Todos somos transparentes. Es una especie de mundo ideal que no está contaminado. Es el mejor grupo humano con el que he trabajado en mi vida y probablemente nunca conseguiré tener el privilegio de trabajar con otro igual en el futuro. Los que vienen a los circuitos y también los que se quedan. Hes duro pasar un cumpleaños lejos de tu familia. Es jodido tener que escuchar cada año a tu hija y a tu mujer cantándote cumpleaños feliz por teléfono, es duro no estar con ellas en un día así, pero esta panda de "cabrones" lo compensan en parte. A punto han estado hoy los jodidos de hacerme llorar en directo.
Seguramente muchos de vosotros lo habréis visto en el previo cuando me han dado toda esa serie de sorpresas. Ha sido una pasada. El mensaje de Alonso, la tarta... pero quizá lo que me ha matado ha sido escuchar a Julio como siempre por mi pinganillo y descubrir que por una vez no me hablaba sólo a mi, que lo hacía en directo para toda España. No me gusta ser el protagonista de nada y os aseguro que me he quedado bloqueado como un tonto. Creo que ha sido un exceso. Después de la carrera he recibido una llamada telefónica de un amigo que lleva también muchos años en el mundo de la comunicación. Me ha dicho: Joer tío, que emocionante, que pasada... yo le he interrumpido y le he dicho que sí, que las dos últimas vueltas habían sido incréibles, que Hamilton... Mi amigo me ha cortado y me ha dicho que no se refería a la carrera, que lo que le parecía emocionante e increíble es ver el buen rollo que tenía con mi equipo y que era un hombre muy afortunado. Nunca nadie ha tenido tanta razón.

Perdonar que no os ponga fotos, pero es que las estoy preparando. Mañana intentaré colgaros algunas. Un abrazo a todos.