VIEJOS TIEMPOS

Acabo de llegar al hotel. Tan casado como siempre, pero con otra sensación. Esa que hace tiempo muchos echábamos de menos. Singapur se va a quedar para siempre en nuestro recuerdo por muchas razones, pero por encima de todas porque nos ha vuelto a refrescar la memoria. A unos porque daban por muerto a Alonso y seguramente ya se han dado cuenta de que no es así, a otros porque a veces nos olvidamos de que en una carrera de Fórmula 1 todo puede pasar. Incluso que alguien que sale 15º acabe 1º. Es obvio que Fernando ha tenido mucha fortuna. Si Piquet no hubiese hecho de mártir involuntario y no hubiese provocado la salida del safety car, su compañero de equipo no hubiera podido ni siquiera acercarse al podio. Si lo hubieran hecho a propósito, como un plan preconcebido en Renault, seguro que no hubiese salido tan bien. Ha ocurrido en el mejor momento posible, justo después de que Fernando hiciese su parada, cuando nadie más la había hecho, pero cuando casi todos estaban a punto de hacerla.

El golpe de suerte ha sido providencial, pero no hubiese sido suficiente. En condiciones normales si a Fernando le hubiese faltado ritmo se le hubiesen echado encima. Sin embargo, Fernando ha sido el más rápido vuelta a vuelta durante casi toda la carrera. En un circuito en el que la potencia del motor es menos importante y las manos del piloto más protagonistas, Alonso se ha salido. El coche de seguridad le ha dado una opción que el sábado le quito el sistema de gasolina y no la ha desaprovechado.

He cumplido mi palabra. Seguro que recordáis que durante la retransmisión he dicho que le iba a dar un tirón de orejas a Fernando por decir ayer que la carrera estaba acabada. ¡Se lo he dado! El mismo me ha dicho: "hazlo, hazlo". Después de las ruedas de prensa me he quedado un buen rato con él y su gente. Estaba feliz, bromista, sonriente, relajado... no quería despedir el año sin lograr un podio y al final, el botín ha sido aún mucho mayor. Su móvil no dejaba de recibir mensajes y el no hacía más que reirse cuando los leía. Le he preguntado por qué había pensado cuando salió el segundo safety car y él muy c.... me dice. "Nada. No me preocupaba. Sabía que no podrían cogerme". Toda España sufriendo y el tío tan tranquilo.

No era el único que estaba feliz. Todo el equipo Renault ha vivido un día muy intenso. Desde el Gran Premio de Japón de 2006 no ganaban una carrera. Es curioso que, dos años después, el mismo piloto que les dio la última ha vuelto a darles una alegría para poner un poco de árnica a tantos sufrimientos. Me han abrazado los mecánicos, las camareras, Briatore, la gente de marketing... 31 carreras después volvían a estar en los más alto.

Fernando no tenía ganas de marcharse del paddock. Quería prolongar el mayor tiempo posible esas sensaciones. Le ha felicitado Webber, Vettel, Stefano Dominicalli... el hombre que más tarde o más temprano será su jefe en Ferrari. Después de la actuación de hoy de Massa y Raikkonen quizá sea antes de lo que algunos piensan. Vale que el safety car les perjudicó mucho, pero el caos de la parada de Massa (el pobre no tuvo la culpa) y la actuación posterior de los dos en la parte final de la carrera culminaron un gran premio de horror que ha terminado de nuevo con los dos Ferrari fuera de los puntos. En el caso de Kimi también fuera de la carrera. Estoy seguro de que lo de hoy, sumado a lo de otros días, puede hacer que cambien las cosas. No quiero decir que Fernando vaya a estar vestido de rojo el próximo año, pero yo no cerraría la puerta del todo a esa posibilidad. Ya habéis visto, en la F1 todo es posible, hasta que el que sale 15º gane una carrera.

Por lo demás hemos tenido algunos problemillas durante el previo pero de los que una vez más, gracias al fantástico equipo con el que tengo el privilegio de trabajar, no os habéis enterado. Gracias Rober, Raúl, Andrew, Miguel... y gracias también a Jorge (cámara). Era su última carrera, ha currado como un animal, tiene los pies llenos de ampollas y encima no hemos grabado el plano nocturno desde lo alto de la noria, que desde que llegó estaba empeñado en hacer. Gracias también a mi gente de Madrid, especialmente a Manu y Julio que me hacen sentir siempre tan cómodo en directo. Nos quedan tres carreras amigos y hasta ahora hemos retransmitido 19 de las 20 victorias de Alonso y 46 de sus 50 podios. Y gracias a todos vosotros que siempre estáis ahí y algunos incluso aquí (había españoles aquí en Singapur y algunos me han dicho que leían este diario de carreras).

Quiero despedirme con esta foto que ha sido una de las más graciosas que he podido hacer aquí en Singapur. El sentido del humor de este operador de cámara. En el cartel pone: No dar de comer al cámara, criatura peligrosa.

Podría ser traducido a titular del gran premio: No des una oportunidad a Alonso, sigue siendo muy bueno.

Me voy a dormir. Mañana nos pasaremos el día volando y esperemos que durmiendo. Cuando despertemos, estaremos en casa.